Después de años de reivindicaciones vecinales y con más de 85.000 perros censados en la ciudad, el Ayuntamiento de Sevilla, liderado por el alcalde José Luis Sanz, ha anunciado un ambicioso plan para impulsar la creación y mejora de parques caninos en la capital andaluza. Este proyecto, que responde a las demandas de los vecinos y propietarios de mascotas, incluye la construcción de un nuevo parque de grandes dimensiones en Sevilla Este y la rehabilitación de varias áreas ya existentes.
Un nuevo gran parque en Sevilla Este
Según la información a la que ha tenido acceso 20minutos, el Consistorio abrirá en las próximas semanas una nueva zona de esparcimiento canino en el barrio de Sevilla Este, que contará con una superficie total de 11.787 metros cuadrados. Con una inversión superior a los 97.000 euros, el parque dispondrá de una pista de agility de 10.845 m², equipada con túneles, pasarelas y elementos de saltos, diseñada para fomentar la agilidad y destreza de los perros. Además, el espacio contará con un pipicán cerrado de 942 m², pensado para que las mascotas puedan correr y hacer sus necesidades en un entorno controlado.
El área también incluirá una zona ajardinada con árboles y arbustos, integrando el parque en el entorno natural del cercano Parque de Torreblanca, con el fin de minimizar el impacto sonoro y visual desde la avenida del Deporte. Esta construcción responde a una reivindicación histórica de los vecinos de la parte norte de la avenida Emilio Lemos, quienes venían solicitando un espacio adecuado para sus mascotas.
Distribución desigual de los parques caninos en Sevilla
Este nuevo parque canino se sumará a los 28 existentes en Sevilla, aunque su distribución sigue siendo motivo de quejas por parte de algunos distritos. De acuerdo con los datos del Ayuntamiento, el distrito Este-Alcosa-Torreblanca cuenta con ocho parques, mientras que en otras áreas como Nervión (cuatro) o Norte, San Pablo-Santa Justa y Bellavista-La Palmera (tres en cada uno), la oferta es menor. Distritos como Triana y La Macarena siguen sin contar con espacios dedicados para perros, lo que genera un creciente malestar entre sus habitantes.
Reparaciones y mejoras en otros parques
Además de la nueva construcción, el gobierno de José Luis Sanz ha iniciado la reparación de varias áreas de esparcimiento canino, atendiendo las necesidades planteadas por los usuarios. Entre los trabajos más recientes se encuentra la reparación de las vallas y puertas de los Jardines del Valle, y la adecuación del suelo de otro parque en Sevilla Este, donde se ha añadido tierra nueva para mejorar las condiciones del lugar.
Otra actuación destacada es la reubicación de la zona canina del Parque de Los Príncipes, uno de los más frecuentados por los sevillanos. Según fuentes municipales, la decisión de trasladar el parque responde a las quejas de los usuarios, quienes solicitaban una ubicación más sombreada y con césped, debido a las altas temperaturas y la polvareda que se levantaba en el área actual. Nuria Gómez, una vecina que visita diariamente el parque con su perra galga, ha confirmado que los técnicos del Ayuntamiento ya han comenzado a tomar mediciones para el traslado, que se realizará al fondo del parque, alejando así el espacio canino de las zonas residenciales para evitar las molestias derivadas de los ladridos.
Un compromiso electoral
Estas actuaciones forman parte de una estrategia más amplia impulsada por el alcalde Sanz, quien, durante su campaña electoral, se comprometió a convertir a Sevilla en una ciudad «amiga de los animales». Este plan incluye no solo la construcción de nuevas zonas de esparcimiento canino en cada distrito, sino también la rehabilitación de las ya existentes, la construcción de un nuevo zoosanitario y la actualización de la ordenanza municipal de animales, vigente desde 1984. Cabe recordar que Sanz ya fue pionero en esta materia en 2009, cuando, como alcalde de Tomares, inauguró el primer parque exclusivo para perros de España.
Con estas medidas, el Gobierno municipal busca atender una demanda creciente de los vecinos y mejorar la convivencia entre los propietarios de mascotas y el resto de la ciudadanía, apostando por espacios más adecuados y sostenibles para todos.